La evaluación de Inteligencia Emocional (IE) está diseñada para conocer su nivel de IE con base en las cinco características de la inteligencia emocional. Es su habilidad para comprender, usar y manejar sus propias emociones de manera positiva para reducir el estrés, comunicarse eficazmente, sentir empatía por los demás, superar los desafíos y resolver los conflictos.

De acuerdo con la investigación de Mayer, Caruso, Salovey y Sitarenios (2003), la inteligencia emocional es diferente al IQ (cociente intelectual), que mide el razonamiento lógico. La IE nos permite comprender mejor cómo alguien maneja sus emociones y las de los demás en situaciones cotidianas.

La IE es una habilidad que puede desarrollarse con el tiempo. Los principales componentes de la IE son el autoconocimiento (un reconocimiento de las emociones propias), la conciencia social (reconocimiento de las emociones de los demás), el autocontrol (capacidad de manejar las emociones de uno mismo) y las habilidades sociales (capacidad de influir y manejar las emociones de los demás). 

Una prueba de inteligencia emocional está diseñada para analizar estos rasgos y conocer qué áreas necesitan desarrollarse para ayudar a completar la capacidad de una persona a fin de desarrollar su IE en situaciones específicas. 

Hay varias formas de evaluar la inteligencia emocional. Se dividen principalmente en tres grupos: autocuestionarios, informes de otros y pruebas de capacidades. Cada uno tiene ventajas y desventajas, pero fundamentalmente están diseñados para evaluar la inteligencia emocional con base en situaciones y sus respuestas. 

El autocuestionario es el más utilizado en las pruebas de personalidad. Rasgos como la calidez, la empatía, la ansiedad, etc., se ponen a prueba de este modo mediante una serie de preguntas que se plantean a la persona evaluada, en una escala gradual, acerca de si está de acuerdo o no con la afirmación. 

Dado que tiene en cuenta a otras personas, también es una técnica muy utilizada solicitar que otras personas aporten sus comentarios. Esto no significa que sea un ataque directo a su persona. Al igual que el autocuestionario, en el que las respuestas se basan en una forma de escala gradual, las preguntas no se le hacen a usted directamente, sino a las personas a las que ha solicitado que le aporten sus comentarios. Conocido comúnmente como calificaciones del observador o retroalimentación de 360 grados, es una forma de entender cómo sus respuestas emocionales y su comportamiento son observados por las personas con las que trabaja. 

Por último, están las pruebas de capacidad. La IE es una habilidad real, por lo que tiene sentido que pueda medirse junto con otras habilidades. Hay varias formas de hacerlo, pero uno de los métodos más comunes es el sistema MEIS, desarrollado por Mayer, Caruso, Salovey y Sitarenios, que analiza las respuestas en función de la identificación de las emociones, uso de las emociones, comprensión de las emociones y manejo de las emociones. 

De acuerdo con el tipo de evaluación que utilice (autocuestionario, cuestionario respondido por otros y la prueba MEIS), tendrá diferentes metodologías para completar una evaluación emocional. 

La persona evaluada responde los autocuestionarios y le dan una idea de su IE. En la prueba se plantea una pregunta y luego se solicita que se responda honestamente en función de las opciones disponibles. Por ejemplo, “me cuesta conciliar el sueño en la noche”, seguido de respuestas como “no es cierto”, “en parte es cierto”, “muy cierto”. 

Los comentarios que aporten otras personas (360 Degree Feedback) son similares al autocuestionario, con la principal diferencia de que son otras personas las que lo responden. Un ejemplo típico sería: “entiendo mis emociones”, seguido de respuestas como “no es cierto”, “en parte es cierto”, “muy cierto”. 

Las pruebas de MEIS se fundamentan en preguntas relacionadas con situaciones hipotéticas e incluyen tres respuestas potenciales que tienen asignada una puntuación por respuesta (el encuestado no tiene conocimiento de la ponderación). Estas respuestas posteriormente se evalúan contra una base de datos de respuestas para obtener una puntuación total y así medir su IE. 

Thomas International aplica el Cuestionario de Inteligencia Emocional (TEIQue). Registrado ante la British Psychological Society, mide 15 rasgos emocionales relacionados con el bienestar, el autocontrol, la emotividad y sociabilidad. 

Dos áreas donde ayuda contar con una buena inteligencia emocional son comprender cómo sus empleados manejarán sus emociones y cuáles de sus colegas ayudarán a las organizaciones a comprender quién es más adecuado para las funciones que pueden ser altamente estresantes o requerir buenas habilidades de liderazgo. 

Para los líderes, poder realizar evaluaciones de IE es una forma práctica de entender quién beneficiará a la organización con los matices y las habilidades blandas que la IE aporta al equipo. 

Contar con líderes dentro de una organización que sean más inteligentes desde el punto de vista emocional puede fomentar un entorno de trabajo calmado, además de que ayuda a mejorar la productividad y a crear un ambiente laboral agradable que reduce la rotación de personal y mejora los objetivos generales de la empresa.

Si se identifica qué candidatos tienen habilidades blandas y una buena inteligencia emocional en la fase de la entrevista, podrá tenerse información más amplia del candidato y del puesto que va a ocupar. Para cualquier empresa que busque tener una guía para la toma de decisiones en el proceso de reclutamiento de las personas que van a ocupar puestos de liderazgo, saber qué candidato tiene un mejor manejo de sus emociones y de las emociones de las personas que lo rodean también sería un aspecto importante para considerar. 

Saber cómo evaluar la IE en una entrevista, por supuesto, es fundamental. Esto puede hacerse durante una reunión individual en la que se planteen situaciones y se evalúen las respuestas con base tanto en la intuición como en la comprensión de la respuesta o bien, puede hacerse utilizando una de las muchas técnicas descritas anteriormente. 

Mediante el Cuestionario de Inteligencia Emocional de Thomas International (TEIQue), puede pedirse a los candidatos que completen esta evaluación en línea antes de una entrevista presencial. Las respuestas y las evaluaciones se mantienen en privado y solo las conoce el encargado del reclutamiento en esta fase. 

El TEIQue de Thomas International evalúa nuestras creencias sobre las capacidades emocionales (por ejemplo, según nuestra percepción, qué tan buenos somos en cuanto a identificación, comprensión y manejo de las emociones, nuestras y de otras personas).

Esas creencias pronostican de forma clara una notable variedad de comportamientos y logros, de los cuales muchos son fundamentales en el trabajo (desempeño laboral, satisfacción con el empleo, estrés laboral, liderazgo, civismo en la organización, compromiso con la empresa, trabajo en equipo, entre otros).